La tarde navegaba entre la mala presentación y el juego manso de los toros, la actuación de las figuras y no había otro puerto de llegada que el del fracaso.
La tarde navegaba entre la mala presentación y el juego manso de los toros, la actuación de las figuras y no había otro puerto de llegada que el del fracaso.
Los silencios, a veces, son sinónimo de respeto, otras de resignación y otras muchas de indiferencia.
Hoy no ha sido, de largo, la mejor corrida; tampoco podemos decir que la más peligrosa, pero sí la más pesada -se entiende por peso, aunque también por su nulo juego-, 602 kg. de media.
No crean que me he marchado de Madrid, ni de Las Ventas, sencillamente es que eso ha sido, o parecido, la tarde de hoy, una tarde de otra feria.
Es frecuente que se diga que este o aquel toro ha tenido poco motor, aunque muy pocas veces se diga, digamos, que ha tenido mucho motor.
Llegó uno de los carteles más flojos de la feria y se notó mucho en los tendidos, que no llegaron ni a media plaza.
Nací en Madrid en Marzo de 1948. Mis primeros trabajos periodísticos los realicé en la crónica deportiva, principalmente en el mundo del fútbol. Más tarde, otras actividades profesionales me alejaron durante mucho tiempo de la labor periodística.