Cuando ayer recibí esa mala noticia, no me la podía creer. Esas letras de tu hija Alexandra para informarme me partieron en dos.
Cuando ayer recibí esa mala noticia, no me la podía creer. Esas letras de tu hija Alexandra para informarme me partieron en dos.
Así estamos viviendo muchos, casi todo el mundo, el día a día en estos tiempos difíciles y angustiosos que nos toca vivir.
Es una realidad, si nadie lo remedia, y no parece que lo haya, que los toros de lidia se quedarán vivos este año en el campo.
Había carteles para Sevilla, había feria proyectada y programada en este 2020, pero va a ser que no.
En este mundo revuelto y arrinconado por ese virus asesino que nos rodea, el mundo del toro está pagando su cuota también.
La situación que vive la sociedad española, y todo el orbe, es horrible, siniestra, aterradora.
Nací en Madrid en Marzo de 1948. Mis primeros trabajos periodísticos los realicé en la crónica deportiva, principalmente en el mundo del fútbol. Más tarde, otras actividades profesionales me alejaron durante mucho tiempo de la labor periodística.