Se marcha agosto y con él la feria a la que llamaban ‘el puerto de primera’ del mes central del verano.
Pues no ha hecho falta que se vaya el mes para saber que ‘el puerto de primera’ no ha existido y lo peor es que ni se le espera.
Triste puerto el vivido en su feria, en sus corridas generales, a las que ya se le pueden llamar, perfectamente, corridas normales. Poca diferencia con otras plazas de segunda de las que abundan en la geografía española durante julio, agosto y septiembre.
Pero si triste ha sido la presentación de los toros en esta feria, antes con el renombre ‘del toro’, solo salvada por los encierros de Fuente Ymbro y Dolores Aguirre, hay otros motivos para mantener y aumentar esa tristeza.
Y no sabemos qué es peor, la presentación de los toros o el aspecto que presentaban los tendidos. En esto último el listón quedaba más bajo aún que el presentado por los toros. Seguramente haya quien mantenga que el toro puede rebajarse, pero eso ya se ha hecho y no ha significado que en los tendidos se recupere el interés.
El aspecto no es el de un 'puerto de 1ª'. Pues ha habido días peores
A salvo las tardes de Roca Rey, que super bien acompañado en el cartel las dos tardes, tampoco ha puesto aquello a reventar, el resto de los días no es que resultara triste, es que daba pena, que es mucho peor.
Bilbao ya no es lo que era y no puede mantenerse con el sobrenombre de ‘puerto de primera’, aunque nos tememos que bajándole a segunda vaya a dar más réditos. Es curioso que el cartel ‘más flojo’ resultara, en proporción, el mejor acompañado en los tendidos. Seguramente sea porque los ‘entendidos’ supieran de antemano que los toros de Dª Dolores y la terna, destacando a Robleño y Castaño, no les iban a defraudar. A lo mejor, por ahí van los tiros.
Mucho se ha de trabajar para reflotar esta feria, pero mas que trabajar sería mucho más importante que se paren a pensar qué es lo que quieren de cara al futuro.
Es muy fácil ser plaza de segunda, sabemos los nombres de los toreros y las ganaderías a lidiar todas las ferias, pero crear afición es otra cosa. Que se lo piensen… bien pensado. Una feria así, con unos tendidos así, resulta hasta ridículo.